Los bailarines más populares suelen ser los que tienen una profunda conexión con otros bailarines y respeto por su comunidad. Para que bailar juntos sea un placer para todos, te damos algunos consejos:
Bailar juntos
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- Pregunta educadamente a tu pareja de baile si quiere bailar y no le ofrezcas la mano sin más.
- Si rechazas una invitación a bailar (lo cual está perfectamente bien), espera hasta la siguiente canción, si es posible, antes de bailar con otra persona.
- Bailar con el otro siempre implica cuidarse mutuamente. Haz siempre que la otra persona se sienta cómoda y segura.
- El contacto visual y una sonrisa son muy valiosos mientras se baila.
- Bailar swing siempre implica creatividad e improvisación. A veces las cosas pueden «salir mal». Las disculpas no son necesarias, a no ser que hayas sido demasiado creativo y hayas hecho daño a tu pareja de baile ;-). Tenlo en cuenta: «a veces menos es más»: no desafíes demasiado a tu pareja de baile.
- El baile social no es una clase, así que por favor no des comentarios no solicitados o una «lección» – sin embargo, siempre se agradece que hagas saber a tu pareja de baile que te ha gustado un movimiento o una idea.
- Termina el baile con una sonrisa y un amistoso «gracias» y, si es posible, abandona la pista junto a tu pareja de baile.
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Seguridad
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- Cuanto más concurrida esté la pista de baile, más cuidadosos y reducidos deberán ser tus movimientos.
- Es obvio que las antenas y los saltos no deben hacerse por la misma razón.
- Preste atención a lo que ocurre a espaldas de su compañero y deténgalo si la colisión es inminente.
- Debido al riesgo de lesiones en el Lindy Hop, evita llevar zapatos con tacones duros/altos (se aplica tanto a los seguidores como a los líderes). Si llevas tacones, baila con más cuidado.
- Si, a pesar de toda precaución, chocas o das una patada a alguien, discúlpate -independientemente de quién tenga la «culpa»- y atiende a la otra persona si está dolorida.
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Físico
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- El Lindy Hop es sudoroso, así que por favor usa desodorante, cámbiate de camiseta a tiempo y lleva siempre una toalla contigo.
- Asegúrate de tener un aliento fresco.
- Una ducha después de bailar es refrescante y tonificante; sin embargo, un aura tan fresca tampoco tiene precio ya al principio del entrenamiento o del evento de danza.
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Aprender unos de otros durante la sesión de prácticas
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- Por favor, responda con educación y evite el tono sermoneador.
- Frases como «me resultaría más fácil si…» o «consigo…» pueden ser útiles.
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